Martín, la 956 es la vencida

Mouche haciendo una posición Capoeiriana (?) ayudado

por su power balance

Por la fecha 11 del clausura, Boca debía visitar a Huracán en el estadio Tomas Adolfo Ducó y defulbo se hizo presente en el mismo. El equipo Xeneize no contaba con Riquelme a causa de un desgarro abdominal, es por eso que su técnico Julio Cesar Falcioni impuso su clásico 4-4-2 con Chavez como reemplazante de Román. Luchetti/ Cellay-Caruzzo-Insaurralde-Monzon / Chavez-Ervitti-Somoza-Colazo / Mouche y Palermo fueron los titulares.

A los 3 minutos de iniciado el encuentro, Boca tuvo la primer chance clara de convertir en los pies del Titán, quién llevaba 10 partidos sin marcar. El arquerito Monzón le tapó un derechazo cruzado en el área chica. Fue ahí cuando, desde la tribuna, nos dimos cuenta de algo: Huracán era más que horrible. Que de un equipo de primera sólo te sepas el nombre del arquero ya es algo a tener en cuenta. No hay que agrandar a Boca: el globo fue uno de los peores rivales de los últimos tiempos. Por momentos los contábamos a ver si eran 11 (?). No tenían una idea de juego y para defender ponían menos garra que un gatito siamés bebé.
Boca se aprovechó. Luego de una gran jugada colectiva y un centro/tiro al arco de Superstar Mush, el Pochi chávez la empujó en la línea y el partido se puso 1-0.
El segundo estaba al caer. Cada avance de Boca era medio gol y cada ataque del globo era otro medio gol xeneize. El primer tiempo debió haber terminado con una diferencia mucho más abultada de lo que fue.
Por otro lado, la tribuna era una fiesta. Cada vez que tocaba la bocha, Palermo era ovacionado. Hubo muchos cánticos en vista al encuentro con River en una popular y platea completamente colmada.

Martín y Pochi, abrazensé

El segundo tiempo arrancó, bue ni me dejó terminar (?) que ya Colazo puso el 2-0 a los 25 segundos con una definición digna de un wing experimentado y no de un pibe que recién comienza a dar sus pasos en el futbol profesional. Luego del gol tempranero, otra vez fueron 45 minutos que parecieron un entrenamiento de la selección con sparrings en pleno mundial (?) Palermo tuvo tres chances claras, pero las desperdició. Parecía que su mala racha no iba a terminar en Parque Patricios.
Pero si Jesús resucitó, ¿por qué el gol de Martín no? Se cumplían 38 minutos cuando Mouche le dio un pase gol al Titán, quien definió defectuosamente y así pudo eliminar la cantidad de sodio que contenía su cuerpo.
Boca ganó y goleó. Sin chiches ni juego bonito, frente a un ¿rival? no digno de pertenecer a esta categoría. Abrazo (?)